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domingo, 18 de marzo de 2012

Soneto nº 3 - press play

Me acerco lentamente a la locura
para quitarme el gris de las pestañas
y deshacerme de las telarañas.
Mañana intentaré hacerme la dura


cuando te vea perder la cordura
por rubias, pelirrojas y castañas,
te diré que te limpies las legañas
tú me dirás que te la he puesto dura


y no seré capaz de resistirme
a besarte en la boca antes de irme,
por la puerta grande soy tan pequeña


que me vuelvo invisible ante tus ojos,
que intento liberarme de despojos
y no creerme nunca ser tu dueña.


Obra de Chiara Bautista - Milk

viernes, 10 de diciembre de 2010

Inercia

Irremediablemente
recuerdo a Maram al Masri
y me vuelvo más hermosa...
Mis labios saben
lo que tienen que hacer.
.
Mis labios saben
a brillo de fresa.
.
Mis labios saben
que hablo por inercia.
.
Saben demasiado, saben romperse
en el momento exacto, igual que yo.

viernes, 27 de agosto de 2010

Soneta jodida, pero contenta

Mordiscos de ratón en mi tableta
de chocolate con trozos de almendras.
Su casa estaba solo a un par de cuadras
de la casa del tío de la trompeta.

Llegó de madrugada, en bicicleta,
yo durmiendo y él, tirando mil piedras
a mi ventana, gritando "no podrás
marcharte sin más, deshaz la maleta,

recuerda la promesa que me hiciste."
En ese momento me encontré al ratón
buscando el chocolate, era de chiste.

Lo extraño fué, que me entrase un calentón
al verle sudado, jodidamente
desesperado por tirar el portón.

La soneta de la libélula



El pequeño dragón de la laguna

vuela tranquilo sintiéndose libre,
no hay nada aquí que le desequilibre,
ni si quiera el reflejo de la luna

ni las canciones ñoñas de la tuna.
Resulta que de pronto se le abre
un mundo aparte cubierto de cobre
que muchos resabidos llaman cuna

pero él preferiría llamar tumba
o guarida de las almas perdidas
que buscan lo que ya nadie les daba.

Allí no llegan las lenguas de lava
allí sólo quedan alas mordidas
y restos de una noche que se acaba.